Empezamos nuevo año y que mejor que incorporar nuevos hábitos y rutinas que nos ayuden a reciclar y gestionar mejor nuestros residuos. Reducir la cantidad de residuos en el hogar no es tan difícil como la gente puede pensar. Por eso en este post hablaremos de cómo cambiar nuestros hábitos respecto a la gestión de residuos.
¿Por qué es importante reducir los residuos en el hogar?
El acto de ayudar al medio ambiente no es algo que se deba hacer en la calle, sino que empieza desde casa. Cada uno de nosotros tenemos la responsabilidad de tener que adquirir nuevas costumbres que ayuden a contribuir y proteger el medio ambiente, cuidar los recursos naturales y reducir nuestro impacto en ellos. La mejor forma de hacerlo es ¡día a día! No existe otro truco más que ese. Ir implementando nuevos hábitos en nuestra rutina poco a poco, de modo que no nos será un cambio muy radical y difícil de llevar.
Si seguimos consumiendo y produciendo residuos tal y como lo hacemos ahora, en unos años esta cantidad por hogar se multiplicará más aún. Por lo que más nos vale tomar cartas sobre el asunto y empezar a cambiar ya. Las expectativas de futuro respecto al medio ambiente no son muy positivas, de ahí que nazca este afán en buscar soluciones efectivas para luchar contra el cambio climático.
¿Por dónde empezar?
La gran pregunta es está, por dónde debemos empezar, qué hay que hacer, etc. Lo más usual es empezar por el reciclaje de los plásticos, papeles y vidrios que solemos tener en casa. De todos modos, esto no es la única solución que existe para reducir residuos, se puede hacer mucho más con sencillos pasos.
1.Evita los productos de usar y tirar, como pueden ser las vajillas y cubiertos desechables, botellas de agua, envases y plásticos innecesarios. En el caso de que se necesite utilizar este tipo de utensilios desechables, lo mejor es optar por los que están hechos de otro material que no sea el plástico.
2.Separa los materiales adecuadamente. Es muy frecuente encontrar productos en los cuales en sus envases podemos encontrar una mezcla de plástico y cartón. En estos casos es importante separar el cartón del plástico y depositarlos en los contenedores pertinentes. Cuanto mejor estén separados los materiales, menos trabajo para los operarios y menores los costes de eliminación.
3.Consumir productos locales y de cercanía. El principal objetivo de consumir productos locales es reducir mucho la contaminación por transporte y por ende de los excesivos embalajes que se utilizan para proteger al producto. Intentar comprar alimentos que vengan en empaques respetuosos con el medio ambiente, en los cuales no predominen las bandejas de plástico o el plástico en general.
4.Productos electrónicos. La gran duda con este tipo de aparatos es ¿qué hacer con ellos? Pues bien, lo recomendable es llevarlos al sitio dónde se adquirieron, normalmente allí se encargan de gestionarlos. Como es el caso por ejemplo de los cartuchos de impresora, ordenadores, baterías, etc. En algunas ciudades hay puntos de recogida, por lo que facilita la gestión de residuos.
Son alternativas que se pueden empezar a poner en marcha desde el momento que sabes de ellas, no requieren de un esfuerzo específico o recursos especiales. En IRMASOL Andalucía siempre apoyamos cualquier estrategia que ayude a una buena gestión de residuos.